Válvulas Lavabos

¿Qué es la válvula del lavabo?

La válvula de desagüe del lavabo es donde tradicionalmente ha ido el típico tapón que nos permitía acumular agua en el lavabo. Aunque hoy en día siguen existiendo versiones con tapón, las válvulas click clack son las más comunes, y también una buena opción decorativa. La válvula de desagüe del lavabo no debe ser pasada por alto, porque a la hora de instalar cualquier lavabo necesitarás contar con un válvula adecuada que cumpla con las características de dicho lavabo, así como también con el resto de la instalación de fontanería del baño. Realmente no es difícil elegir la válvula de lavabo apropiada, pero es un elemento al que prestar cierta atención, pues si no lo hacemos podemos darnos cuenta a la hora de instalarla que no es compatible con nuestro lavabo.

Elegir la válvula del lavabo según su función, con rebosadero o sin rebosadero

Las válvulas de lavabo están disponibles en dos tipos principales según su función: con y sin rebosadero. Este apellido hace referencia a si el lavabo cuenta con rebosadero o no. Un lavabo con rebosadero es aquel que cuenta con un orificio en una zona superior, de tal manera que si se ha comenzado a acumular agua porque nos hemos olvidado de cerrar el grifo, o porque hay una obstrucción, el agua salga por el rebosadero y vaya al desagüe, evitando desbordamientos e inundaciones. El rebosadero va por el exterior del lavabo y llega directamente a la válvula de desagüe. Es por esto que la válvula de desagüe con rebosadero cuenta con un pequeño orificio cerca de la parte superior de la válvula que permite que el agua salga si el lavabo se llena demasiado. Estas válvulas suelen ser más largas, pues tienen más componentes, y la sección por la que pasa el agua es más amplia, ocupando más espacio. Esto hace que tengamos que optar por sifones de lavabo algo más pequeños si tenemos un espacio reducido en el mueble bajo el lavabo, aunque dependerá en cualquier caso del tipo de instalación que tengamos. La válvula de lavabo sin rebosadero es más sencilla y más pequeña. Ambas pueden ser iguales en aspecto exterior, de precio similar, y con una instalación casi igual. Elegir una u otra depende en realidad del propio lavabo que hayamos elegido.

Comprar válvula de lavabo click clack: buena, bonita y barata

Estamos acostumbrados a ver las típicas válvulas que permiten el paso del agua por medio de unos orificios circulares, y que podemos tapar con un tapón de goma. Sin embargo, esto que ha sido tan típico de los lavabos tradicionales, hoy en día se ha visto sustituido por las válvulas click clack, que son de buena calidad, son bonitas, quedan bien, y son baratas y fáciles de instalar, por lo que lo tienen todo. Se trata de una válvula que funciona como si fuera un botón. Al presionarla, estamos cerrando la válvula y bloqueando el paso del desagüe, de manera que el agua se acumula en el lavabo. Sin embargo, al volver a pulsar, se libera y deja pasar el agua, vaciando el lavabo. El sonido que hace la válvula al presionarla y al soltarla es lo que le da el nombre de válvula click clack. No es solo su función lo que hace que sea de las más instaladas, sino también su aspecto, pues hace que no tengamos por qué tener un tapón por el lavabo, y que tampoco lo vayamos a perder. Además, el embellecedor tapa el desagüe, lo que nos deja un aspecto mucho más elegante.

La válvula de lavabo como elemento decorativo

Aunque parece que es el propio lavabo, los accesorios de baño, o incluso los grifos, los que nos permite dar un aspecto decorativo al cuarto de baño, lo cierto es que hoy en día elementos como la válvula de desagüe del lavabo también tienen un papel relevante. Y es que al igual que podemos elegir elementos que encajen con un determinado estilo, la válvula del lavabo también puede ir a juego con el aspecto del cuarto de baño. Ya de por sí podemos optar por una válvula redonda o por una válvula cuadrada, donde lo que cambia es la forma geométrica del embellecedor superior. Nos permite optar por un aspecto estándar o por un diseño diferenciador. El acabado de la válvula también puede variar. De hecho, este es el factor que marca la diferencia entre unos modelos u otros. Y es que están disponibles en múltiples colores. Por ejemplo, tenemos válvulas de lavabo metálicas cromadas, pero también válvulas de lavabo negras, válvulas blancas, e incluso válvulas doradas. Si tenemos un baño vintage, podemos optar por una válvula con aspecto envejecido, que encajará con un mueble de baño con patas isabelinas, o si queremos que pase desapercibida en un lavabo de color blanco, podemos comprar una con un embellecedor de cerámica.